Los productos o químicos para la limpieza son uno de los mejores inventos de la sociedad moderna. Son un aliado importante para evitar la transmisión de enfermedades y para eliminar la suciedad de los espacios y lugares en los que pasamos la gran parte de nuestro día. Su poder en la salud asociado a la higiene va más allá de limpiar nuestros utensilios de cocina, quitar manchas difíciles de la ropa y/o eliminar olores.
La calidad de estos productos es necesaria para garantizar su seguridad y eficacia para los consumidores finales. Un buen detergente es ahorro, facilidad, garantía, higiene y salud.
¿Cómo saber si estamos ante un buen detergente como las marcas OMO, TOTAL CARE, ARIEL, FAIRY O FOAM PLUS?
¿Cómo saber si el detergente que compramos es de calidad, quitamanchas, blanquea o es efectivo ante la suciedad? ¿Qué es y para que sirve el llamado ingrediente activo que prefieren grandes marcas y productos de la categoría en todo el mundo? Son la espuma, la fragancia o textura el gradiente de calidad medido por fabricantes y consumidores del mundo en productos de aseo.
Los detergentes, agentes como agentes limpieza emulsionan los aceites y la suciedad gracias a sus formulaciones basadas en el ingrediente activo. Los podemos encontrar en diferentes formatos líquido, en polvo e incluso monodosis (cápsulas) concentradas de un solo uso. Estos detergentes generalmente no son para todo uso, pero pueden especializarse, por ejemplo, para lavar platos, lavar ropa e incluso como brebajes de alta eficiencia para manchas y olores difíciles.
Las formulaciones de detergentes pueden ser bastante complejas como los ingredientes activos, requisito clave para la emulsificación de aceites, suciedad y otros compuestos que causan manchas y olores. Las enzimas también son necesarias para descomponer compuestos difíciles, como los que se encuentran en la orina de las mascotas. La combinación de estos diferentes compuestos da como resultado superficies limpia y parte del principio de ingrediente activo que tenga el detergente.
Composición principal de los detergentes
Los elementos principales presentes en los detergentes modernos son:
Los surfactantes o tensioactivos son el ingrediente activo actual del detergente
Los constructores o potenciadores retienen el calcio y el magnesio que puedan estar presentes en el agua y evitan que la suciedad se vuelva a depositar en la tela.
Las enzimas quitan las manchas de proteínas como el huevo, la leche y la sangre tienen sus moléculas descompuestas por estos elementos para que el agua pueda eliminarlas.
Blanqueadores: como su nombre lo indica blanquean la ropa y eliminan las manchas más difíciles.
El relleno: solo sirve para aumentar el volumen del detergente; no tiene propiedades de limpieza. Puede constituir entre el 5 % y el 45 % de la materia total, según la fórmula. Los detergentes concentrados no contienen rellenos. Un buen detrgente como Total CARE o FOAM plus, no tienen o tienen muy poco relleno.
Los abrillantadores ópticos: materiales fluorescentes que permanecen visibles incluso después de aclarar la ropa. Reflejan los rayos ultravioleta del sol, haciendo que la ropa parezca más blanca de lo que realmente es (de hecho, les da un tinte azulado o verdoso, según la marca). Los colores son más vivos en la ropa de colores.
Cualidades de un buen detergente
A la hora de elegir un buen detergente, es muy importante que tengamos en cuenta los siguientes puntos:
Compatibilidad con los materiales, principalmente por la ausencia de sales que le conviertan en corrosivo para el material.
Baja formación de espuma, la espuma no sólo impide el contacto de las sustancias activas de los detergentes y desinfectantes sobre el material, sino que también obstaculiza la transmisión térmica del calor sobre estos, así como su acción disolvente y germicida.
Fácil aclarado, los residuos del detergente generan corrosión y/o manchas en el instrumental.
Biodegradables, exentos de fosfatos.
Los detergentes en forma líquida tienen más ventajas con respecto a los de presentación en polvo si por ejemplo el lavado es automatico, pero si Tambien es manual o require el remojo, sería mas aocnsejable el solido, así como si es en agua más fria, si ellavado es en agua calinete, entonces el estado líquido asegura que la solubilidad de sus componentes sea inmediata y completa
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Características ideales, de un buen detregente:
Alto rendimiento – El rendimiento se define como la extensión de superficie y cantidad de suciedad que es capaz de eliminar el detergente por kg de producto empleado. Dicho de otra manera, que cunda lo más posible.
Poder mojante –Se trata de que pueda llegar allí donde se encuentran acantonados la suciedad y los microorganismos para poder retirarlos y que la desinfección pueda ser después eficaz. Esto es necesario puesto que el agua, dada su elevada tensión superficial, no es capaz de penetrar en determinados espacios si son demasiado finos.
Resistencia a la presencia de aguas duras – La dureza del agua, junto con la temperatura, es uno de los factores que más influyen en la acción de los detergentes, disminuyendo tanto la calidad y persistencia de la espuma como la capacidad de limpieza. Es por ello que han de estar adecuadamente formulados para actuar, sea cual sea el grado de dureza o alcalinidad del agua y evitar su interferencia.
Capacidad de arrastre – El detergente ha de ser capaz de emulsionar y retirar la mayor cantidad posible de materia orgánica para que sea después el agua a presión la que, al aclararlo, lave la superficie llevándose la materia orgánica. 6 – Fácil aclarado – La operación de retirar el detergente con ayuda del agua a presión debe poder hacerse con facilidad, sin dejar residuos sobre las superficies y ahorrando de esta manera mayor cantidad de agua.
Protección de los materiales – Los detergentes deben incorporar protectores e inhibidores de la corrosión para evitar que su carácter alcalino o ácido termine dañando los materiales al cabo de un tiempo prolongado de empleo.
